Lástima y hasta un poco de risa,
pues el humor no me abandona  nunca.
La  cantidad de hombres
que he espantado  contando mentiras lúgubres de mi locura.
O las veces que no he asistido a evento por mi terror  a la noche Mis fobias a caminar sola por fiestas. Y hasta un amigo ignorante que se alejó por temor, tal cual lo expresó. Me da tanta risa su ignorancia.
Todo sirve en esta vida. Para ser más fuerte y no llorar cada vez que maximizo las acciones que creo organizan  contra mi, paranoica soy , pues. Qué le puedo hacer, al menos ya no aparecen lenguas de fuego obsenas en la pantalla de la computadora.
Hoy no tengo ganas de tristezas, pero recuerdo , y algunos pasajes de mi pasado son
verdaderamente terribles.
No tengo ganas de contar hoy nada que me remita a esa vida.
Quiero celebrar que hoy es el cumpleaños de mi esposo y que iremos juntos al mejor restaurant.