Tres cuchilladas hirieron mi espalda
Una punta filosa doblegó mi valor.
Entregué el botín sin decir mu.
El silencio envolvió la fuga, el hurto y al ladrón.
Tres cuchilladas hirieron mi espalda.
Una punta filosa doblegó mi cuerpo.
Un sudor frío lo cubrió.
El silencio envolvió la fuga , el hurto y al ladrón.
Tres cuchilladas hirieron mi espalda.
Una punta filosa arrebató mi paga.
No era una suma cuantiosa
Era mía a pagar un regalo, un parto .
Tres puntos me cosieron en la herida.
En silencio absoluto resistí el dolor.
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