No derrames sal sobre mi herida.
Estoy en carne viva.
Los gritos no me doblegan.
ni quebrantas mi voluntad.
las ordenes son cadenas por comprar.
Los versos al oído,
las palabras dulces,
conmueven más que la hiel.
Recuerda que la caricia alivia.
Los besos conquistan
Me rindo ante la ternura.
Soy una mujer
con un sol en el vientre
Acaríciame y seré tuya.
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