Extraño tu calor en el lecho,
tus mil quinientos cigarros,
tu voz de trueno,
y no has partido aún
Eres parte mía, amor.
Si te alejas es
porque te amo
y quiero tu bien.
Traté en vano
de convencerte
curarte en amor
pero no fui capaz
Yo misma necesito curar
mis nervios,
estos ataques
Esposo,
Aguardo tu retorno
pues entonces iniciaremos
un camino nuevo,
limpio, claro
en paz.
.
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