Amanecí aferrada a un roca
en medio de  una tormenta.
Naufragó mi frágil bote
yo perdida en la inmensidad del mar.
Las olas golpean y espuman
El barranco está muy lejos
para prenderme de él.
Rocas filudad miran amenazantes.
No puedo perder el equilibrio
ni marearme
debo levitar sobre un mar ajeno.
Solo me queda luchar.
Nadar hasta la orilla lejana
Atreverme .
Seran horas duras,
beberé agua salada
hundida bracearé con fuerza
bucearé
haré el muertito
Cuando sienta desfallecer mi cuepo de atleta
el mar me varará a la orilla,
pero no moriré
No hoy
que me duelen el alma y los huesos.
El frío me consume y 
paraliza mis músculos.
No moriré colmada de agua salada
ni perdida en aguas ajenas.

Moriré cuando yo quiera
en sueños mansos inducidos
de mis pastilas coloridas.
Entonces si con todas las ganas
Moriré.