Vistas de página en total

lunes, 12 de mayo de 2014

He de cavar tres tumbas 
pequeñas, profundas, 
impenetrables.
  selladas.
en un paraje perdido.
Así nadie  profanará 
las almas heridas
  de los más amados
Mi padre, mi abuela doliente.
Hincada en el barro, oraré
Mis lágrimas serán flores 
Altas , coloridas , frescas.
Vivirán por siempre en la memoria
Nadie los dañará más.

No hay comentarios: