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miércoles, 10 de junio de 2015

él me espió desde el principio
 cada caricia cada movimiento cada suspiro mío
él lo sabía lo conocía
estuvo mirando desde que me raptaron
con ojos vendados 
no importa
me encantó la mañosería la ricura del manoseo
esa manera tan extraña de raptarme
de calentarme de ponerme a punto de caramelo
para él para su gusto nomás
él  rodea mi cintura de niña
acaricia mi   cuello con la punta de  sus dedos largos
exacerba el deseo en mis senos
- ahh los senos son mi perdición
 ya lo descubrió
y me hace presa fácil 
de hombres y mujeres -
echo  el brassier la truza
ohhhhh la desesperación 
ya no resisto  más las ganas 
contorsiono  la espalda 
muevo las caderas 
exhibo orgullosa mis pechos redondos
él detiene mis movimientos
para graduar 
mi excitación
 sus manos envuelven mis senos dilatados
 se acerca  pausado y besa uno a uno mis pezones 
los succiona suave
como un  súbdito humilde
mis caderas se liberan a  ritmo acompasado
él recuesta el largo de mi cuerpo en un tálamo 
soy frágil peso poco
sus dedos ágiles me recorren 
mis vellos púbicos  humedecen menudas
cristalinas gotas
corren por mis muslos
él sorbe con fruición
y no sé más si soy yo si es él 
 halando cada vello besando alveolos
para mi gozo para mi tortura
él se interna  entre mis piernas
y mis gemidos son  resoplidos 
son  aullidos bajitos ronroneos 
placenteros
él intenta  explorar  las paredes de mi cáliz
sus labios son maestros su lengua alfilada
 escapa  un grito leve
cierro los ojos maravillada
 recibo agradecida  una nueva dimensión del placer
 y oscilan caderas  los párpados cerrados 
con él en mis intrañas
mi pubis invadido de su hombría
goza baila suplica por un arresto más
es el  goce pleno de los sentidos
el  que no quiere no debe terminar jamás
aquel que envuelve revuelve plena la caverna
de  felicidad absoluta
de  plenitud total 

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