Vistas de página en total

jueves, 16 de enero de 2014

He  de arrancar ese olor a  melaza 
tiznado en mi cuerpo desde hace mucho.
Así no aparecerás más  en mis sueños,
ni mis labios repetirán tu nombre
como una plegaria,
cada día, en todo segundo,
como un clavo hiriendo mis días,
sin paz ni sosiego.

No hay comentarios: