Este sol nos ampara ,
quema, acalora pero ilumina
nuestras almas con esplendor especial
esta tarde.
Hemos imaginado el mar.
Una playa y
escribí poesía.
Hacía tanto
la sangre no alborotaba mis venas,
las ideas se agolpan de pronto,
y mis dedos corren ligeros por un piano
imaginario
como notas musicales
de tiras cómicas,
una tras otra, atropellándose
entre ellas ,
libres, veloces,
Desperté de un pesado sueño,
que por ahora quiero olvidar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario