Las aves de rapiña rondan mi casa.
Escucho el aleteo ,su grito aterrador
no temo a nada esta mañana.
He vestido mi cuerpo de lentejuelas relucientes
y maquillé mis cara con pintura de guerra.
Mis ojos de hechicera los doblegará.
Ellas no soportaran el brillo de mis vestidos,
El poder de mis ojos.
Volaran en retirada,
Por hoy, estoy libre de su amenaza.
Mañana me hincaré en oración.
No hay comentarios:
Publicar un comentario