Descubro mi torso,
el pecho desnudo,
brotado de púas erectas .
Mi cuerpo entero es una herida sangrante.
Sopletes de fuego atizan mis entrañas .
el pánico persigue mis pasos.
Confunde mis ideas, no hilo palabras.
Enfermé un día aciago, hace mucho,
cuando entregué el alma .
El golpeaba mi rostro , mi vagina.
La justicia en el Perú recibía mis reclamos.
Nadie escuchó mis quejas. .
Hube de salir de mi hogar contra mi voluntad .
Un reguero de sangre manchaba mis alfombras
al partir
Perdí el habla 6 años.
Luego , forme un hogar dulce,.
Cuando uno ama son posibles los milagros.
El recuerdo maligno me visita de noche,
en las calles oscuras.
los días soleados, en cualquier momento, sigue mis pasos
inocula el virus del miedo
Hoy me inyectaron tras una crisis paranoide.
Los demás no entienden .
Nadie entiende nada.
Yo sigo mi marcha ,
Escribir y expulsar estos demonios
de una vez por todas.
Algún día.
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