Unos hombres entraron por la noche a mi casa
No robaron joyas ni objetos valiosos.
Arrancaron de cuajo mi corazón.
Mordieron el alma.
Se la comieron a mordiscos.
Un reguero de sangre corre por mi cuerpo.
Hoy camino con un agujero en el pecho
Unos hombres entraron por la noche a mi casa
No robaron joyas ni objetos valiosos.
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