¿ Y quién me dice
cómo vadear las aguas espesas
de los ríos de azogue
y la llovizna ácida de estos días ?
Volar encima del cielo
escapar por los tejados,
No ver, no oir, no saber
nada de nadie , nada de nada.
La gente de afuera habla en exceso
y dice poco.
Aquellos llamados amigos bailan en la feria
de vanidades y entre ellos se cortejan y se adulan
como viejas cortesanas.
Pobre de quienes creen en aquellas palabras vanas.
Tome su madero y piérdase en la inmensidad del desierto
No hay comentarios:
Publicar un comentario