Vistas de página en total

lunes, 17 de octubre de 2016

Cúbreme,  la tormenta de arena  no amaina 
los gruesos granos  golpean mi cuerpo sin cesar,
con fuerza de humano
cúbreme,  oscurece en el desierto y es tan amplio,
tan incierto,  mi temor crece.
Es la primera noche en estas arenas sin la protección de una morada.
¿ Lograremos salvar la calma,
 no caer en la terrible desesperación?
No existe otro lugar donde esconder nuestro pesar.

No hay comentarios: