Quería comerme las calles de su mano.
Conversar , reír a gritos, como buenos amigos.
Acompañar nuestras tristezas con sonrisas.
Contemplar el mar desde su ventana.
¡Cómo erré , si lo que los hombres desean
no es compañía.
Y tú antiguo compañero de la vida,
confundiste los temas.
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