El escucha música.
A todo volúmen.
El se abstrae en  un pasado, 
un mundo que fue suyo, 
 el tiempo , lo borró.
El ingresa a una película 
El recuerda sus años mozos
como una película de tiempos mejores,
con Julio Iglesias, como fondo musical.
El añora, él sueña, 
sonríe a ratos con los párpados cansados. 
Nadie vivió tan faustuosamente como él,
nadie en este país de pobres trabajadores

Yo lo amo así, sencillo y digno.
No posee más aquellos autos lujosos, ni
viaja  a La Costa del Sol.
Soñamos, eso sí, soñamos mucho.
Algún día nuestros sueños se harán realidad,
tan solo por premiar  su inmensa bondad.