Vivir , morir entre la arena ardiente del desierto es mejor a buscar denodada un oasis , que no he de hallar.
Promesas, que no son sino granos de arena , que el viento lleva a su antojo.
Tú eres como todos los demás.
Ni amigo, ni santo, tan solo uno de tantos.
Pobre de mi ,que creí ciegamente en tu valor.
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