Y si de pronto una noche pierdes el rostro,
los ojos , tu mirada no alcanza a contemplar más allá
que la palma de tu mano.
Continúa el paso.
Utiliza los pies para medir las distancias,
calcula como hacían los ojos.
Pronto habrás dominado el arte .
Continúa .
Es nuestro pacto sagrado.
No nos vencerán.
No hay comentarios:
Publicar un comentario