El escucha a Julio Iglesias
El mismo disco.
Aquellas odiosas canciones
estrujan mis nervios.
Temo romper su equipo,
de un puntapie.
He intentado  , he rogado.
Nada.
Es su musica sagrada.
Yo, escucho y escribo.
Escribo pues temo al Horror
bajo mi puerta,
a mi propia mano presta a terminar
con mi vida.
Ahora mismo, calzo las zapatillas.
No me detengo hasta el barranco.
Ay, cuan hermosos es el cielo,
el resplandor de la hoguera 
en el cielo.

Prefiero las alturas arrojarme del barranco,
La seduccion del abismo,
El mar inmenso aguarda mi cuerpo
como una madre protectora.
Adios amor mio, no quise que sufrieras.
El error fue amarnos tanto,
que nos volvimos  uno,
Indivisible.
Y yo odio a Julio Iglesias.
Salgo al malecon,  
a encontrar la paz en las olas.
El sol durmiendo de a pocos en el mar.
Yo sere parte de aquella naturaleza amada.
No mas dolor,  angustia, ni soledad.
Adios Sofia, mi nieta adorada que no vere mas.
No lo pienso mas.
Al grito de victoria me lanzo del precipicio
como La Maga y su paragua.