Los curiosos me siguen como en una procesión.
Todos quieren contemplar mi pecho florecido de mil colores.
Era una llaga , les digo ,
La ocultaba por pudor,
día a día crecía sin control.
Ellos no me creen.
Piensan, es una mentira.
No importa.
Solo yo conozco el horror,
El espanto ,
de ocultar una llaga oscura en el pecho.
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