la mujer al costado mío palpita sudores por los poros
adivino su entrepierna húmeda y aparto mi pierna instintiva
hoy el día es hermoso el mar un espectáculo digno de ser admirado como único y último
instante de esta mi vida y no tengo ganas sino de agradecer disfrutar un cielo radiante en junio
tendida en la placidez del lecho de la duna bañada por la lluvia tenue de la arena protectora.
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martes, 2 de junio de 2015
la mujer al costado mío palpita sudores por los poros
adivino su entrepierna húmeda y aparto mi pierna instintiva
hoy el día es hermoso el mar un espectáculo digno de ser admirado como único y último
instante de esta mi vida y no tengo ganas sino de agradecer disfrutar un cielo radiante en junio
tendida en la placidez del lecho de la duna bañada por la lluvia tenue de la arena protectora.
adivino su entrepierna húmeda y aparto mi pierna instintiva
hoy el día es hermoso el mar un espectáculo digno de ser admirado como único y último
instante de esta mi vida y no tengo ganas sino de agradecer disfrutar un cielo radiante en junio
tendida en la placidez del lecho de la duna bañada por la lluvia tenue de la arena protectora.
la mujer a mi costado chilla como una gaviota herida
sus graznidos hiere oídos de los seres de la duna
patea a un enemigo invisible, la señora de mandil blanco
intenta aplicar un calmante
ella exige su regalo,
todos exigimos el regalo de cumpleaños que la mujer de mandil blanco retiró con agilidad de ilusionista.
Aplaude grita feliz la mujer a mi costado , yo nunca ajena a la injusticiao bservo a la mujer del mandil resignada ofrecer la caja de dulces no quiere problemas no le conviene ellas abusan con las pobres cuando son ricas intenta pero bajan la cabeza al final
la mujer a mi costado aplaude grita feliz yo aplaudo con ella en la duna remota de un lugar incierto.
sus graznidos hiere oídos de los seres de la duna
patea a un enemigo invisible, la señora de mandil blanco
intenta aplicar un calmante
ella exige su regalo,
todos exigimos el regalo de cumpleaños que la mujer de mandil blanco retiró con agilidad de ilusionista.
Aplaude grita feliz la mujer a mi costado , yo nunca ajena a la injusticiao bservo a la mujer del mandil resignada ofrecer la caja de dulces no quiere problemas no le conviene ellas abusan con las pobres cuando son ricas intenta pero bajan la cabeza al final
la mujer a mi costado aplaude grita feliz yo aplaudo con ella en la duna remota de un lugar incierto.
lunes, 1 de junio de 2015
es mi vientre
plácido lecho florecido
de cardos, lirios, estrellas de mar del pleoceno
tenso lienzo poroso de lenguas miles
de cortesana mesalina de hembra eva adán
danza solitaria y feliz bajo la menuda lluvia de arena del desierto
atemporal, atípica sempiterna o como se entienda
la serenidad el silencio dulce en la duna.
plácido lecho florecido
de cardos, lirios, estrellas de mar del pleoceno
tenso lienzo poroso de lenguas miles
de cortesana mesalina de hembra eva adán
danza solitaria y feliz bajo la menuda lluvia de arena del desierto
atemporal, atípica sempiterna o como se entienda
la serenidad el silencio dulce en la duna.
era tan placentero recibir la lluvia fina
arena tupida sobre las mejillas
sobre mi cuerpo,
posado como una sirena sobre la duna,
ignorando, burlona del transcurrir de las horas , las estaciones,
sumando años al reposo en la placidez del vientre lechoso de la madre
o la cortesa o lo que fuera o se llame o se diga.
arena tupida sobre las mejillas
sobre mi cuerpo,
posado como una sirena sobre la duna,
ignorando, burlona del transcurrir de las horas , las estaciones,
sumando años al reposo en la placidez del vientre lechoso de la madre
o la cortesa o lo que fuera o se llame o se diga.
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